domingo, 28 de febrero de 2016

NATALIA2


_ Estoy un poco preocupada. No me gusta mentir a mis padres. ¡Como se les ocurra llamar a casa de Marta tendré un problema!
_ No le des más vueltas Natalia... ¿Cómo van a llamar a estas horas de la noche? Tus padres ya estarán durmiendo. Ya verás como desaparecen tus preocupaciones entre "mis Cubatas" y "tus Gin Tonics" ..,- dijo Carlos con su voz  de seductor mientras conducía cada vez más deprisa

NATALIA1

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Era un Domingo por la noche. Volvíamos de casa de mis suegra. Después de intentar desempeñar el papel de la perfecta esposa de hijo mayor, sin mucho éxito, estaba agotada. Los tres niños venían detrás durmiendo. Mi marido conducía muy concentrado y muy despierto, se había tomado un café antes de salir. Yo hacía tremendos esfuerzos para mantenerme despierta. Sentía como  los parpados cada vez me pesaban más, me costaba un triunfo mantenerlos levantados, era como si un campo magnético  los atrajera hacia abajo, yo no los podía controlar, estaban imantados  Me quedé dormida por un instante. Me desperté y vi una luz blanca muy fuerte, estaba lejos pero venia directa hacia nosotros._! Cuidado con ese coche!, le dije a mi marido._ Ya, ya lo he visto, me contestó con tono de autosuficiencia   .

LA PLAYA

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Mi hija mayor se entretenía  dejando las huellas de sus pies  en la arena y mirando como  al instante   las borraban las olas    Buscaba conchas en la playa para forrar una cajita . A la abuela le encantan las cajas y había pensado que si encontraba  muchas conchas , y luego las pintaba de colores  podría pegarlas en una caja rosa que compro en IKEA y parecería una caja nueva y mucho más bonita.

Mi hijo pequeño se rebozaba con dos amigos   en la arena mientras construían un magnifico castillo con túneles subterráneos  que se tragaban el agua que las inesperadas olas dejaban al romper .Esos túneles excavados con palas y manos  protegían a la majestuosa fortaleza  de ser absorbida por una ola traicionera y convertirlo todo en escombros y barro.

  Era un continuo ir y venir de cubos de agua, de cubos de arena ,de palas , rastrillos, risas y gritos  que  a mí me resultaba un agradable sonido de fondo, un sonido  familiar  donde la playa sonreía a los niños y juntos playa y niños  cantaban baladas sin sentido, baladas sin sonido porque  yo las  percibía de una forma cada vez más lejana, más diluida, casi imperceptible, habían llegado a ser para mí un agradable silencio sonoro

FRIO

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Tenía la boca seca.  Con la única mano que podía mover  cogió un poco de nieve y se la llevo a los labios. Acto seguido y con una voz metálica dijo: _¡No me dejes! Hinqué la rodilla en la nieve y mi acerqué a él, quería calentarle con mi aliento, con mi voz, con el calor humano que desprendía mi cuerpo.  Me vi reflejado en sus ojos , que enmarcados por filamentos blancos que le teñían las cejas y las pestañas, ganaban intensidad. La piel de su cara estaba quemada por el hielo y había adquirido el color oscuro, ese rastro negro que deja la necrosis por la falta de circulación de la sangre. Solo oía su ansiosa respiración  golpeada de forma intermitente por ráfagas de nieve y viento. A mi alrededor ni rastro de vida, solo el silencio que asustado dejaba paso a los bramidos de una tormenta que desde la cima más alta nos acechaba como un lobo a su presa.

LA CHICA DEL KILIMANJARO




-¡Espere un momento!!  -¡Mierda ¡¡ -! Se me ha escapado ¡

 Ahora tengo que esperar …Pero la reunión y mi jefe no me van a esperar, pensé cabreada -¡El otro ascensor! - ¡Luz verde! -¡Está aquí !-  ¡Menos mal!.

 Entro corriendo en el ascensor y pulso  el número 6, cuando se están cerrando las puertas con el rabillo del ojo veo que alguien se acerca…Lo siento, pensé , pero llegas tarde, ahora te jodes tu.

Estoy sola. Me doy la vuelta ,saco la barra ,me miro en el espejo  y me pinto los labios. ,.¡Bien! ¡¡Preparada para la reunión.!! Mi presentación tiene que ser la mejor , pienso confiada

Pero de repente el ascensor se para, me doy la vuelta, guardo la barra de labios en el puño de mi mano. Se ilumina el numero 1. Todavía en el primer piso y además se para, menudo coñazo digo en voz alta sabiendo que nadie me oye.